Turquía lanza ataques aéreos en Siria tras atentado en Ankara
octubre 24, 2024El bombardeo dejó doce civiles muertos, mientras el gobierno turco promete una respuesta contundente.
El ejército turco llevó a cabo una serie de ataques aéreos en el norte de Siria e Irak, como represalia por un atentado que tuvo lugar en Ankara y que dejó cinco muertos y más de veinte heridos. Las autoridades turcas atribuyen este ataque a la guerrilla kurda PKK, aunque esta organización no ha comentado al respecto. En la operación militar, el Ministerio de Defensa turco declaró que se destruyeron 32 objetivos de las milicias kurdas, incluyendo instalaciones militares y depósitos de municiones, asegurando que se tomaron medidas para minimizar el daño a civiles. Sin embargo, las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), una alianza armada liderada por kurdos, reportaron que los bombardeos causaron la muerte de doce civiles, entre ellos dos niños, y heridas a otros veinticinco en localidades como Qamishli, Kobane y Tal Rifaat.
El ataque aéreo se produjo pocas horas después de que dos asaltantes atacaran la fábrica de Industrias Aeroespaciales de Turquía (TUSAS) en Ankara, matando al taxista que los transportaba y usando explosivos para ingresar a las instalaciones. Las víctimas adicionales del ataque fueron identificadas como empleados de la empresa, incluyendo un ingeniero mecánico. Los atacantes fueron “neutralizados”, un término que se refiere a capturas o eliminaciones por parte de las autoridades.
El ministro de Defensa, Yasar Güler, declaró que el PKK es responsable del atentado, prometiendo una cacería contra quienes considera terroristas. La fábrica de TUSAS es fundamental para la producción de aeronaves militares, incluidas las que se utilizan para combatir a las milicias kurdas en la región. Este acto violento ocurre en un contexto de creciente tensión política, en el que el gobierno de Recep Tayyip Erdogan y su aliado ultraderechista MHP han mostrado disposición para reiniciar negociaciones con el PKK en busca de un nuevo proceso de paz.
Mientras tanto, el líder encarcelado del PKK, Abdullah Öcalan, ha recibido una visita tras tres años y medio de aislamiento, y ha expresado su disposición para contribuir a una resolución pacífica del conflicto, siempre que las condiciones lo permitan.