Influencer portuguesa condenada por violencia doméstica

Joana Mascarenhas recibe una pena de prisión suspendida por someter a su hija a agua fría.

La influencer portuguesa Joana Mascarenhas ha sido condenada a dos años y medio de prisión, con la ejecución de la pena en suspenso, por un delito de violencia doméstica relacionado con su comportamiento hacia su hija de tres años. La sentencia, emitida por un tribunal de Lisboa, se produce tras la confesión de Mascarenhas en junio de 2023, donde reveló que había utilizado agua fría como método para controlar las rabietas de su hija.

En sus declaraciones en redes sociales, Mascarenhas relató dos incidentes específicos en los que aplicó esta técnica: una vez sumergiendo a la niña hasta el cuello en una piscina y otra mojándola con agua fría en la bañera mientras aún llevaba puesto el pijama. A pesar de que las rabietas se detuvieron, el tribunal determinó que tales métodos son inadecuados para el cuidado infantil y enfatizó que, si se aplicaran en adultos, serían considerados humillantes.

Durante el juicio, la defensa de Mascarenhas argumentó que su decisión fue una “elección desafortunada” que no debería ser calificada como un delito, alegando que no causó daños físicos ni psicológicos a la menor. Sin embargo, la Fiscalía subrayó la necesidad de sancionar el comportamiento, a pesar de tratarse de acciones aisladas. Además de la pena de prisión suspendida, la influencer deberá cumplir con un plan de reinserción y pagar una indemnización de mil euros a su hija.

Tras conocer la sentencia, la defensa ha anunciado su intención de apelar, disponiendo de un plazo de 30 días para presentar el recurso. Este caso ha generado un debate considerable sobre las prácticas de crianza y el uso de métodos disciplinarios en la crianza de los niños en la sociedad actual.