EEUU y China, entre la estabilidad y el enfrentamiento: “El mundo es lo suficientemente grande para el desarrollo de ambos países”  

Antony Blinken se reúne con Xi Jinping en un clima de comunicación renovada entre las superpotencias.

La reciente reunión entre Antony Blinken, secretario de Estado de EE. UU., y el presidente chino Xi Jinping, marca un respiro en las tensiones entre las dos superpotencias. A pesar de las diferencias, ambos líderes expresaron su deseo de una relación más colaborativa entre sus países.

El encuentro se produce después de una serie de interacciones entre Biden y Xi, así como las visitas previas de Blinken a China en los últimos meses. La retomada comunicación contrasta con el tono beligerante que caracterizó la relación entre ambas naciones en el pasado reciente.

Xi Jinping, en su encuentro con Blinken, hizo hincapié en la importancia de que China y Estados Unidos sean socios en lugar de adversarios, destacando la necesidad de buscar puntos en común y evitar una competencia despiadada. Por su parte, Blinken abogó por una diplomacia activa y una comunicación clara sobre las áreas de diferencia para evitar malentendidos.

Sin embargo, el viaje de Blinken a China no estuvo exento de tensiones. Horas antes de su llegada, el Senado de EE. UU. aprobó un paquete de ayuda para países como Ucrania, Israel y Taiwán, lo que generó reacciones tanto en Taipei como en Pekín. Además, se discutió sobre la presunta ayuda militar china al régimen de Putin, un punto de fricción en las relaciones bilaterales.

A pesar de los desafíos, la cooperación entre Estados Unidos y China en la lucha contra el fentanilo muestra un área donde ambas naciones pueden trabajar juntas. Sin embargo, los analistas advierten que las tensiones persistirán, especialmente a medida que se acerquen las elecciones en EE. UU., donde se espera un endurecimiento del discurso hacia China por parte del presidente Biden.