Crisis de desnutrición aguda en Nigeria: un llamado urgente a la acción humanitaria

Médicos Sin Fronteras y otras organizaciones alertan sobre el aumento alarmante de casos en el norte del país.

En el norte de Nigeria, la desnutrición aguda severa está alcanzando niveles críticos, con un aumento significativo en el número de niños que requieren atención médica urgente debido a complicaciones mortales. Ximena Campos, coordinadora adjunta de operaciones de Médicos Sin Fronteras (MSF) para África del este, subraya la gravedad de la crisis, comparándola con otras emergencias globales que a menudo acaparan la atención humanitaria.

Según Campos, la situación ha empeorado año tras año, con 2024 presentando un panorama especialmente sombrío. La inseguridad, la falta de fondos y la disminución de la cobertura mediática han contribuido a agravar la crisis, mientras que los esfuerzos se han desviado hacia conflictos en otras partes del mundo como Ucrania y Gaza.

En abril de 2024, MSF reportó un aumento del doble en la admisión de niños con desnutrición severa en comparación con el año anterior, especialmente en lugares como Maiduguri y Karin Madaki. La infraestructura sanitaria insuficiente y los brotes de enfermedades como la malaria han complicado aún más la respuesta humanitaria.

Campos destaca la necesidad urgente de una acción decisiva para prevenir muertes evitables debido a la desnutrición. Además, resalta la vulnerabilidad extrema de los niños pequeños y las mujeres embarazadas, quienes sufren las peores consecuencias de la desnutrición aguda.

Organizaciones como las Naciones Unidas han solicitado donativos significativos para abordar las necesidades nutricionales en Nigeria, pero la respuesta del gobierno nigeriano sigue siendo crucial para enfrentar esta crisis catastrófica.

La llamada de MSF y otras organizaciones es clara: se necesita un compromiso renovado y una mayor inversión para evitar que la desnutrición continúe devastando comunidades enteras en el norte de Nigeria.