Ataque con cuchillo en Shanghái: tres muertos y alerta por aumento de violencia

Un hombre apuñala a casi una veintena de compradores en un supermercado, reavivando la preocupación por la seguridad en China

Un violento ataque en un supermercado de Shanghái ha dejado un saldo de tres muertos y 15 heridos, desatando alarmas sobre el aumento de incidentes con armas blancas en China. El suceso ocurrió el lunes por la noche, justo cuando el país se preparaba para celebrar el Día Nacional del 1 de octubre. Un hombre de 37 años, identificado por su apellido Lin, irrumpió en el establecimiento del distrito de Songjiang, atacando a casi veinte personas que realizaban sus compras.

Según la policía, Lin viajó desde otra provincia para “desahogar su ira por motivos económicos personales”. Tras el ataque, varios vídeos en redes sociales mostraron escenas perturbadoras con cuerpos cubiertos de sangre, incluyendo el de un niño entre las víctimas. Este incidente se suma a una serie de ataques recientes con cuchillos en el país, generando inquietud sobre la seguridad pública.

En los últimos meses, varios ataques con arma blanca han sacudido a diversas comunidades en China. Desde el asesinato de un niño en Shenzhen hasta un ataque en una escuela japonesa en Suzhou, la violencia ha suscitado preocupaciones sobre un posible aumento del descontento social relacionado con las dificultades económicas. Aunque China cuenta con estrictas regulaciones sobre la posesión de armas de fuego, los ataques con cuchillos se han vuelto más notorios, lo que ha llevado a la población a cuestionar la efectividad de las medidas de seguridad.

A pesar de que las estadísticas oficiales indican que China tiene una de las tasas de homicidio más bajas del mundo, estos incidentes han reavivado el debate sobre la seguridad y el bienestar de la sociedad china en un contexto de creciente tensión económica. Las autoridades, por su parte, han minimizado los incidentes, afirmando que “este tipo de eventos aislados pueden ocurrir en cualquier país”. Sin embargo, la percepción de inseguridad se está volviendo cada vez más palpable entre la población.