LIBRA (23 septiembre-22 octubre).

Empieza una nueva semana, Libra, y a pesar de todo lo que llevas dentro, has decidido algo: vas a ser feliz. Cueste lo que cueste. No es que tu vida sea perfecta. No es que todo encaje. Pero sí hay algo nuevo en ti: las ganas reales de estar bien. De dejar de dar explicaciones, de dejar de quedarte en lugares donde no te cuidan, de volver a ti.

ESCORPIO (23 octubre-21 noviembre).

Escorpio, lo cierto es que estás cargando más de lo que deberías. Lo sabes. Y aun así, sigues adelante como si nada. Como si fueras invencible. Como si el cansancio no te tocara. Pero te toca. Y fuerte. Esta semana no se trata de hacer más. Se trata de no caer. No decaigas. Aunque creas que bajar los brazos es más fácil, tú no viniste a conformarte. Si te fallan las fuerzas, descansa

SAGITARIO (22 noviembre-21 diciembre). 

Empieza una nueva semana, Sagi, y aunque te hagas la fuerte, sabes que algo te está removiendo por dentro. Hay algo que vuelve. Algo que no esperabas. Algo que creías superado. Y de pronto, se abre una puerta que ni tú pensabas tocar. Pero se abre sola. Sin permiso. Sin aviso. Y te descoloca.

CAPRICORNIO (22 diciembre-21 enero).

Capricornio, y otra vez estás dándole demasiadas vueltas a todo. Te haces preguntas todo el tiempo, pero hay una que no deja de sonar en tu cabeza: “¿Por qué?” ¿Por qué pasó esto? ¿Por qué ahora? ¿Por qué yo? Y la verdad, Capricornio, es que hay cosas que no tienen respuesta. No todo se puede entender. No todo se puede controlar.

ACUARIO (22 enero-19 febrero).

Estás viviendo un momento único, Acuario. Lo sabes, lo sientes… Puede que aún no entiendas todo lo que está pasando dentro de ti, pero estás cambiando. Estás creciendo. Estás empezando a ver con más claridad quién eres y hacia dónde vas. Y eso ya lo cambia todo. No pierdas el tiempo en lo que te resta. Sonríe a quien te odia, pero no te desgastes intentando entenderlo.

PISCIS (20 febrero-20 marzo).

Pececito, esta vez no hay excusas: es momento de confiar en ti. Puede funcionar. Todo eso que te estás imaginando, lo que sueñas en silencio, lo que llevas tiempo queriendo empezar; puede salir bien. Pero no va a pasar por arte de magia. Va a pasar cuando dejes de dudar de ti y empieces a machetaerle.