Zoológico de Guadalajara, una Arca de Noé en la urbe

Zoológico de Guadalajara, una Arca de Noé en la urbe

agosto 29, 2024 Desactivado Por admin

Conservación y cuidado de especies en peligro en el corazón de Jalisco

Ubicado en el corazón de Guadalajara, el zoológico de esta ciudad se ha consolidado como uno de los mejores de América Latina, destacando por sus avanzadas instalaciones y su compromiso con la conservación de la fauna. Con más de 36 años de historia, este zoológico se ha convertido en una verdadera Arca de Noé, donde más del 85% de las especies que alberga están en peligro de extinción o en alguna categoría de riesgo.

Entre los habitantes de este espacio destacan el lobo mexicano, el manatí, y la tortuga casquito, todos ellos símbolos de la biodiversidad que está en riesgo. Además, el zoológico cuenta con ejemplares únicos en Latinoamérica, como el rinoceronte de la India, el pingüino de la Antártida y el orangután de Borneo.

El director técnico del zoológico, David Espinosa Avilés, subraya la importancia de la labor de conservación, especialmente en el caso del lobo mexicano, que estuvo al borde de la extinción en los años 70. Gracias a los esfuerzos conjuntos de zoológicos y un programa binacional entre México y Estados Unidos, esta especie ha logrado recuperarse y pasar de estar extinta en el medio natural a ser considerada “en peligro de extinción”.

Por otro lado, Ricardo Dávalos Saénz, responsable del Herpetario, destaca la situación crítica de la tortuga casquito de Vallarta, una especie descubierta hace apenas cinco años y que ya enfrenta el peligro de extinción debido a la destrucción de su hábitat por el avance urbano y turístico en Puerto Vallarta.

El Zoológico de Guadalajara no solo se dedica a la preservación de especies, sino que también emplea métodos modernos de manejo animal. A través del condicionamiento operante con refuerzo positivo, los animales aprenden a colaborar en su propio cuidado sin necesidad de anestesia. Ejemplos de este manejo incluyen a la elefanta africana Kenya, que permite exámenes de sus patas y orejas, y a los manatíes Claudia y Lorencillo, que cooperan en sus revisiones médicas.