El Avance Imparable del CJNG en Jalisco

Pobladores de Michoacán temen por su seguridad ante la expansión del cartel

El crimen organizado sigue asolando la región limítrofe entre Jalisco y Michoacán, con el Cártel Nueva Generación (CNG) avanzando sin freno. Decenas de hombres armados al servicio del CNG han irrumpido en diversas localidades del municipio de Santa María del Oro, Jalisco, en la frontera con Michoacán, según alertaron los habitantes. Pobladores de Tocumbo, Tingüindín y Cotija, Michoacán, denunciaron que esta movilización crece rápidamente y temen que pronto llegue a sus municipios. Alfonso Maldonado, un ganadero de la zona, expresó su preocupación, señalando que el gobierno de Jalisco no ha tomado medidas para detener el avance del CNG, lo que ha generado un clima de inseguridad y miedo entre los residentes.

Los habitantes de Tocumbo, agricultores, ganaderos, comerciantes y familias de jornaleros, temen que la violencia que ha afectado a comunidades de Santa María del Oro también los alcance. Maldonado recordó que ya han ocurrido ataques en Cotija y Tingüindín, resultando en la muerte de la presidenta municipal y otros episodios de violencia, y teme que su comunidad sea la próxima en sufrir. Ante esta situación, pidió a la Secretaría de la Defensa Nacional que establezca un destacamento o base militar en Las Pilas, Jalisco, para frenar el avance del CNG. Consideró este punto estratégico para evitar que el cartel se apodere de más territorio y continúe minando caminos y predios con explosivos.

Un habitante, mientras huía con su familia, captó con un dron a un grupo de avanzada del CNG movilizándose cerca de los límites con Michoacán. En los videos se observa a los hombres y los vehículos del cartel circulando en la zona, a menos de una hora de Tocumbo. El pasado 26 de julio, El Universal reportó que integrantes del cartel atacaron y desplazaron a decenas de familias de Santa María del Oro, Jalisco, y Los Reyes, Michoacán, tras la orden del Gobierno federal de retirar las bases del Ejército Mexicano que resguardaban la zona limítrofe. Entre las localidades que se han convertido en pueblos fantasma por la ofensiva del CNG se encuentran El Santuario, Los Desmontes, El Sauz, Santa Rosa, La Taberna, La Soledad y Zipoco, donde los habitantes han huido para salvar sus vidas.